Sauerkraut o Chucrut o también conocida como col agria, es una comida típica de Alemania, que sirve como acompañante de un gran número de comidas típicas de este país, especialmente con la carne de cerdo y las salchichas.
Este platillo nace de la fermentación de las hojas de repollo o col y aunque muchos pensarán que nació en Alemania, lo cierto es que no, este platillo proviene de China, se dice que los soldados encargados de vigilar la muralla china fueron los primeros que se atrevieron a fermentar la col o repollo. Esta receta viajó hasta Europa a través de la Ruta de la Seda. Se cree que la col agria pudo haber nacido de un descuido, sin embargo, este tipo de fermentación no puede echar a perder la col, sino que la conserva por largos períodos junto con sus vitaminas.
Es por eso, que en un inicio la col agria se preparaba como encurtido para poder sobrevivir a la crudas épocas de invierno, donde una dieta balanceada era necesaria para no enfermarse. Sin embargo, poco a poco este platillo se hizo parte de la dieta diaria de los alemanes, sin importar el clima.
La col fermentada es posible hacerla en casa, aunque claro es necesario ser muy paciente, ya que esta receta dura de 10 a 15 días dependiendo del clima, sin embargo, el resultado será una auténtica col agria casera.
A continuación te presentamos una receta casera del Sauerkraut:
Receta
Ingredientes
- 1 1/2 kg repollo blanco sin la parte gruesa
- 2 hojas de repollo grandes enteras
- 50 g sal de mar
- 1 cucharada de bayas de enebro
- 1 cucharada de cebada
- 1 frasco grande de boca ancha
- 1 frasco pequeño
- Palo de mortero
- 1 lienzo poroso
Preparación
- Lava y seca muy bien los dos frascos.
- Muele la cebada y colócala en el fondo del frasco grande. Sobre una tabla de madera machaca una de las hojas enteras sin romperla. Colócala sobre la cebada.
- En un recipiente pon el repollo finamente picado. Agrégale sal y enebro. Presiona con la mano y machacada mezcla con el palo de mortero.
- Cuando comience a producir líquido, pon este líquido dentro del frasco sobre la hoja previamente colocada y presiona con ambos manos.
- Deja que repose el líquido obtenido por una hora y vuelve a presionar. Si disminuye el volumen del repollo vuelve a cortarlo finamente, ponle sal y enebro y presiónalo en un recipiente, deja que suelte líquido y sigue rellenando el frasco. Deja que repose una hora y continúa con el mismo procedimiento hasta completar el frasco.
- Coloca la hoja que sobró, también machacada pero entera.
- Coloca un lienzo sobre la última hoja. Llena el frasco pequeño con agua y colócalo dentro del grande para hacer presión. Se debe mantener todo a una temperatura cálida.
- Después de 4 días retira el frasco pequeño y el lienzo, lava el lienzo y el exterior del frasco pequeño. Retirando el moho que se ha formado, cubre nuevamente con el lienzo y colócalo nuevamente el frasco con agua. Presiona para que el jugo que se ha formado cubra la mayor superficie del contenido. Repite esta operación cada dos días y hasta que no se forme más moho. Presiona de vez en cuando con el frasco pequeño.
- Después de 10 días o 15 si el clima es muy frío, el proceso habrá terminado, cuida que el repollo tenga una consistencia blanda y un sabor marcado.
- Retira el frasco pequeño, así como el lienzo y la hoja grande. Envásalo en frascos más pequeños y guárdalos dentro de la nevera. Si se llegara a formar moho, retíralo y presiona el resto.
El Sauerkraut es tan famoso en Alemania, que hay una inmensa cantidad de variaciones, es casi seguro que cada familia tendrá su manera única de hacerla, o quizás hasta su ingrediente secreto, pero lo que nunca cambiará es el proceso.
Si vives en Alemania puedes encontrar el sauerkraut en los mercados o supermercados, sin embargo siempre es mejor hacerla uno mismo, por eso esperamos que te animes a preparar esta receta y nos compartas tu experiencia en los comentarios.
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Chevere!